Esta noche de insomnio que me da por recordar las lineas de tu ausencia me sumerjo en los deseos de tener tu sombra entre mis brazos.
Y antes de que cruces la puerta que te lleve a otros labios, otras sábanas, otros abrazos yo me quedo con la tibieza de tu piel que se me ha quedado pegada a las yemas de los dedos, me quedo con las gotas de tu pasión que llovias sobre mí, con la sensación de mis muslos recorriendo tu cuerpo como si deseara explorar tierras desconocidas entre mis sábanas humedas, con tus labios buscando el punto exacto donde mi piel cambia de emociones, con la dureza de tu sexo navegando en mí una y otra vez como si estuviesemos perdidos en medio del oceano.
Me quedo con el temblor de tu cuerpo cuando la madrugada nos sorprendía abrazados sin querer soltarnos jamás, con tus palabras sigilosas que se desvanecian en la oscuridad, con tus orgasmos en mi cuerpo, con tus dedos recorriendome .
Me quedo recostada en esa cama de sábanas humedas viendote partir.
